26 de febrero de 2007

MADRE, AMIGA, APOYO Y EJEMPLO.

Corona de espinas,
cargaste tanto tiempo,
ahora, madre eterna
te regalo estos versos
que son lo único que tengo.
A esa mujer
que conoce lo profundo
de mis pensamientos,
solo le pido,
no me borre de sus recuerdos.
Con la cabeza erguida
me enseñaste a enfrentar el sufrimiento
y quien diría, que ahora soy yo
el consuelo en tu tormento.
Maldigo la hora
en que salí de tu seno,
donde juntas nos refugiamos del tormento,
de una vida de dolor,
de lóbregas noches
de amarguras y desencuentros.
Solas y despreciadas crecimos,
como amar sin ser amada
que gran sacrilegio.
En espíritus errantes nos convirtieron,
hombres que no valoraron
el amor verdadero.
Pero, aún así renacemos
porque siempre existe el consuelo
de tener a tu lado el afecto
de esa hija que te ve
más que como madre,
como amiga, apoyo y ejemplo.

1 comentario:

karen velez dijo...

me parece super cherere y romantico tambiem muy verdadero
abril 21 del 2011